España como problema


USA Ch.Amahte's Rockin The Red Carpet


En cierta ocasión, adquirí el compromiso de localizar un ejemplar de exposición de podenco ibicenco para exportarlo a Inglaterra. Aquel encargo, que en un principio supuse que no me ocuparía más de un par de semanas, se convirtió con el tiempo casi en una pesadilla de más de dos años. Fue un enorme problema localizar un ejemplar digno representante de esta raza, pero sobre todo, porque era  muy difícil encontrar ibicencos con pedigree en España.
Llegué a contactar con varios criadores que tenían ejemplares muy prometedores, pero cuando les preguntaba por la existencia de papeles de algún ejemplar concreto, la respuesta era siempre negativa. Además, la mayoría de las veces el criador apostillaba: "¿Qué gano yo o el futuro comprador con gastarnos dinero en sacarle un pedigree?. La gente lo que quiere es un perro, no un papel".
Entendí entonces que la situación de la mayor parte de las razas españolas en España es vergonzosa. Me di cuenta de que es más fácil ver media docena de ejemplares de podenco ibicenco en el ring de una exposición en USA o Inglaterra, que aquí, en su patria natal.
Yo jamás he pertenecido a una canina o a un club de raza, pero es que me han quitado las ganas. Me parecen organizaciones más vetustas e inútiles que una de aquellas oficinas burocráticas del favorito de Carlos IV, Manuel Godoy. Si su cometido es el de proteger y dinamizar la cría y promoción de las razas españolas, no son más que un enorme fracaso.